En CAEMBA somos conscientes de la importancia de la cultura de la prevención en materia de salud pública. Por ello, junto a la Fundación “Atacames Contra el Dengue”, entregamos seis máscaras al Ministerio de Salud Pública (MSP). Realizamos esta entrega para evitar que ocurra una sindemia (varias epidemias juntas), es decir que al Covid-19 se sume el dengue, transmitido por la picadura del vector Aedes aegypti.
Es muy riesgoso que exista una sindemia entre ambas enfermedades debido a que el Covid-19 y el dengue producen síntomas parecidos (fiebre, dolor muscular, dolor de cabeza y fatiga). Sin embargo, el tratamiento de ambas enfermedades es muy distinto en cada una. Es prácticamente opuesto.
El impacto combinado de Covid-19 y las epidemias de dengue podrían tener consecuencias potencialmente devastadoras en la población en riesgo. Se espera que durante el primer año de la pandemia, el factor climático tropical no juegue un papel importante en la modulación de la circulación de Covid-19.
Para evitar esto, es fundamental reducir las fuentes de los criaderos de mosquitos (agua empozada) e implementar las medidas de control de adultos que deben desarrollarse en áreas afectadas o donde existe alta incidencia del dengue.
La aplicación espacial de insecticidas (nebulización) es necesaria con el objetivo de eliminar rápidamente la población de mosquitos adultos y reducir la transmisión del dengue. También se recomiendan insecticidas precalificados por la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Para realizar todo este trabajo, el MSP no contaba con máscaras especiales para trabajar en la nebulización espacial. Por ello, desde CAEMBA donamos varias máscaras para que el MSP pueda trabajar adecuadamente.